viernes

Recolección de Plantas



Usted prepara su mochila. No ha olvidado proveerse de un libro con buenas ilustraciones, que le van a permitir identificar las plantas, sal bien de mañana cuando aun refresca así el sol ya ha hecho notar su presencia y se ha evaporado el rocio, evita salir un día despúes que ha llovido.


Técnicas de recolección



Todo el mundo puede recolectar plantas, pero cuando se usan con fines medicinales, hay que tomar algunas precauciones:


  1. Evitar las plantas de lugares contaminados. En pleno campo también puede haber contaminación química, no recolecte plantas que se crían en determinados lugares, si no quiere que su tisana se convierta en un cóctel de sustancias venenosas.

  • Las orillas de las carreteras, ahí abunda la carbonilla, el plomo y otros tóxicos, procedentes de los tubos de escape de los automóviles.
  • Los linderos y lugares próximos a los campos de cultivo: si estos han sido rociados con pesticidasy herbicidas, es prácticamente seguro que las plantas de alrededor también han recibido salpicadura pesticida.
  • Los lugares próximos a chimeneas o vertidos de industrias contaminantes (mercurio, cadmio, etc...)
2.  Recolectar solo las plantas sanas y limpias.
     Deseche las plantas que presenten signos de              haber sido atacadas por insectos o parásitos,              o que hallan sido mordidas por caracoles, Cuidado      con los que tienen deposiciones de animales.

3.  Procura que las plantas estén secas.
     Las plantas recolectadas en días húmedos o                lluviosos se enmohecen fácilmente y por tanto se        conservan peor. De modo que hay que recogerlas       cuando se encuentren bien secas.

4.  Identificar bien las plantas.
     Si tiene alguna duda, deténgase tranquilamente          frente a la especie en cuestión. Observe sus                detalles.  Aspire su aroma.  Consulte los dibujos y      las fotografías de su libro. Si sigue con dudas y no      consigue identificarla positivamente, absténgase          de usarla.  Los errores se pueden pagar muy caro.

5.  Recolectar sin destruir.
     No arranque la planta siempre que le resulte                posible.  Tenga en cuenta que hay especies                protegidas (como la genciana o el árnica), que en        los Parques Nacionales está prohibido recolectar          plantas.

6.  No mezclar especies distintas. 
Resulta incorrecto mezclar varias especies en una misma bolsa, es preferible un recipiente para cada especie, así las plantas se pueden identificar con mejor claridad.

Partes que se recolectan

Debido a que no todas las partes de una planta tienen siempre interés desde el punto de vista médico, es necesario tener en cuentan varias indicaciones según la porción de ella que vayamos a tomar.

Flores
Las flores se recolectan antes de que la corola este completamente abierta, que es cuando los pétalos contienen más sustancias activas.  Al transportarlas hay que evitar el calor y las bolsas de plástico.

Hojas 

Las hojas se recogen a comienzos de la floración, pero antes que las flores se hayan desarrollado; por que es entonces cuando contienen la mayor cantidad de jugos.  No cortarlas todas, pues la planta moriría. Se desechan las hojas manchadas (puede ser signo de una infección por virus).  No se deben amontonar ni arrugar, sino que han de almacenarse extendidas en un lugar plano.

Tallos

El momento ideal par recolectar los tallos es después que han brotado las hojas, pero antes de que hayan salido las flores.

Sumidades

Las sumidades, es decir las extremidades floridas de las plantas, se recolecta usando una tijera adecuada, no partiéndolas con la mano, para no lesionar los tallos.  Hay que cortar por donde el tallo todavía es tierno, y no más abajo donde lignifica y endurece.  Suele ser suficiente 20 a 30 cm.

Corteza

Por regla general la corteza se recolecta al principio de la primavera, siempre antes de la floración, que es cuando circula más savia por los tallos y las ramas, y es además cuando mejor se puede separar del tronco.

Raíces y rizomas

Las raíces y los rizomas se recolectan en otoño, cuando hayan caído todas las hojas, o en primavera, cuando empiecen a brotar.  En las plantas bienales, el momento ideal es el otoño del primer año.  En las plantas vivaces es conveniente esperar la segundo o tercer año de vida.

Antes de proceder a su conservación, las raíces y los rizomas hay que lavarlos bien con el fin de eliminar la tierra y los insectos que puedan llevar adheridos.  No conviene rascarlas con cepillo, porque se eliminan las capas de células superficiales que pueden contener principios activos, como ocurre con la raíz de la valeriana.

Conservación

Lo normal es que las plantas medicinales no se utilicen inmediatamente después de su recolección, es necesario conocer cuales son los mejores métodos para que conserven sus propiedades curativas.
Tres procesos: desecación, envasado y almacenamiento.

1. Desecación


La desecación consiste en eliminar progresivamente la humedad, una planta húmeda es presa fácil de las bacterias y hongos, que la atacan alterando sus principios activos. Además los hongos producen sustancias tóxicas, las bacterias necesitan mas de un 40% de humedad para reproducirse y los hongos el 15%, una planta bien seca no suele contener mas de un 10% de humedad, lo cual impide la reproducción de tales microorganismos.

Consejos para desecar:
  • Tiempo necesario: En tiempo cálido, las flores se secan en 3-6 días. En tiempo de frío tardan unos días más.
  • La desecación nunca debe hacerse al sol, pues se perderían muchos principios activos de las plantas, especialmente las esencias.  Tiene que realizarse siempre a la sombra, en lugares bien aireados y exentos de polvo.
  • Los productos vegetales recolectados se extienden sobre un papel o cartón en el suelo o bien encima de estanterías. No hay que colocarlos directamente encima de ladrillos o cemento.
  • Deben colocarse en capas finas, y removerlas una o dos veces al día.
  • No debe usarse papel impreso, como el periódico, pues los productos químicos de las tintas pasan a la planta.
  • Las sumidades y las flores que no pierdan fácilmente sus pétalos, se cuelgan atadas en ramilletes boca abajo a lo largo de una cuerda, a la sombra y bien aireado ( por ejemplo cerca de una ventana abierta), estos ramilletes pueden protegerse con un cono de papel blanco, para evitar la exposición directa a la luz.
  • Los frutos pueden secarse extendidos sobre bandejas o ensartados a lo largo de un hilo.
La mayor parte de las plantas pueden consumirse tanto frescas como secas. Sin embargo hay algunas que únicamente proporcionan efectos medicinales cuando están frescas, mientras que otras solo se pueden usar cuando estan secas.

Plantas que deben usarse frescas:

Aliaria                             Toda la planta
Berro                              Hojas y Tallos
Cinoglosa                        Hojas
Ciprés                             Frutos y Madera
Coclearia                         Toda la planta
Eupatorio                        Hojas y Raíz
Hiedra                             Hojas
Rábano                           Raíz
Siempre viva Mayor         Hojas
Tormentilla                      Rizoma
Vellosilla                          Toda la planta
Verbena                           Toda la planta


Planta que deben usarse secas:

Ásaro                             Hojas y Raíz
Asclepias                        Raíz
Bola de nieve                  Corteza
Cáscara sagrada             Corteza
Cinoglosa                       Raíz
Clavero                          Botones Florales
Clematítide                     Hojas, flores y raíz
Colombo                        Raíz
Epilobio                          Flores y Raíz
Frángula                         Corteza
Galega                           Toda la planta
Galeopsis                       Toda la planta
Graciola                         Toda la planta
Hepática                        Hojas
Hierba centella               Hojas y flores
Judía (fríjol)                   Vainas
Liquen de Islandia          Talo
Lirio                               Rizoma
Pensamiento                  Toda la planta
Pie de gato                     Flores
Pimentero                      Frutos
Tusílago                         Hojas y Flores

2.  Envasado


Una vez secos los productos vegetales recolectados, tienen que ser envasados de forma que no sufran deterioros por la acción del aire, el sol, la humedad, el calor, u otros factores externos.

Consejos:
  • Es preferible envasar los productos vegetales sin triturar, pues de esta manera ofrecen menor superficie sobre la que pueden actuar las bacterias, los hongos, enzimas, es preferible triturarlos inmediatamente antes de su consumo.
  • Emplear recipientes de vidrio, cerámica, hojalata(latas), tela o cartón.  Debe evitarse el plástico. No es preciso que el cierre sea hermético.
  • Hay que rotular los recipientes con el nombre de la planta, y también conviene indicar el lugar de recolección así como la fecha de envasado.

3.  Almacenamiento


Los recipientes que contienen los productos de las plantas deben conservarse en un lugar oscuro, fresco y seco. La luz, calor y humedad son las principales causas del deterioro.

Es necesario comprobar periódicamente el deterioro de las plantas, para detectar a tiempo insectos, moho, etc.

Como regla general, las plantas medicinales no se deben conservar durante más de dos años.




Fuente; enciclopedia de las plantas

martes

MUNDO VEGETAL,

MUNDO VEGETAL, 


La Célula:


Los cientificos al estudiar otros vegetales con el microscopio se dieron cuenta que no solo la corteza del alcornoque estaba constituida por células. Todos los seres vivos ya sean vegetales o animales, están formados por una o muchas células agrupadas.
Cada célula es una unidad de vida.  Es la porción más pequeña de un ser vivo que tiene vida propia; es decir, que nace, se nutre, crece, se reproduce y muere.
El tamaño de las células oscila generalmente entre 5 y 50 micras (milésimas de milímetro), es decir que en un milímetro cabrían de 20 a 200 células, según su tamaño.
Algunas células se hallan predestinadas a vivir únicamente unos minutos, renovándose de continuo, mientras que otras viven tanto tiempo tanto como el ser vivo del cual forman parte.

Constitución celular
Cada célula está formada por:

  • El núcleo, que contiene la información genética que recibió de su antecesora, en la que se encuentran impresas todas sus características en forma cromosomas y genes, las cuales, a su vez, las transmitirá a sus descendientes.
  • El citoplasma, De consistencia viscosa semejante a la clara de huevo, donde se producen todos los procesos bioquímicos.
  • La membrana, cito-plasmática, que rodea por completo a la célula, y filtra selectivamente las sustancias que deben penetrar en su interior.
Características de la célula vegetal

Las célulasque constituyen los vegetales presentan dos características fundamentales, que no poseen las células animales:

  1. La membrana de celulosa 

     Se trata de una gruesa membrana celular, situada por fuera de la membrana cito plasmática, que está formada por celulosa.  Es como un estuche poroso que la aísla y protege, y que persiste cuando muere la célula convirtiéndose en su sarcófago.  Las células animales carecen de esta gruesa membrana celulósica, por lo que al morir, se descomponen por completo y no dejan rastro.

La membrana de las células adultas puede contener otras sustancias además de la celulosa:

  • la lignina, en las células de la madera;
  • la suberina, en las del súber o corcho;
  • la pectina o la cutina,en la cutícula que recubre los tallos jóvenes y las hojas.

2.  Los plastos

     Esta es otra peculiaridad de las células vegetales.  Los plastos son unos corpúsculos situadas en el citoplasma, que contienen dicersas sustancias colorantes.  Los más comunes son los cloroplastos, de color verde debido a su contenido en clorofila.

En los cloroplastos tiene lugar la fotosíntesis, extraordinaria reacción química por la que las sustancias minerales inorgánicas del suelo y el aire se transforman en almidón y en otras sustancias orgánicas, gracias a la energía de la luz del sol.

Las células son unos prodigiosos laboratorios químicos. En cada una de ellas, a pesar de su diminuto tamaño, se producen miles de reacciones químicas que dan como resultado la síntesis de glúcidos (hidratos de carbono); que bien se van acumulando en su interior o bien se vierten al exterior.

Los alcaloides, esencias y otros principios activos, producidos asimismo en las células vegetales, se almacenan en unas cavidades situadas en el citoplasma, llamadas vacuolas. Cuando estas vacuolas se rompen por la presión ejercida sobre alguna de las partes de la planta, se liberan los principios activos contenidos en su interior.



Fuete; revista